La empresa creadora Wireless Lab tiene una enmarañada política de privacidad en la que advierte sobre la información que entregas a cambio de participar en la más reciente tendencia.

La aplicación FaceApp es el más reciente fenómeno de Internet. Desde celebridades a personas comunes y corrientes están compartiendo una selfie en la que su rostro está modificado digitalmente para lucir más viejos. Sin embargo, los usuarios no se están dando cuenta que al usar la aplicación están entregando en bandeja de plata desde su dirección IP y ubicación real, hasta una imagen que se puede usar para reconocimiento facial.

La política de privacidad de FaceApp abarca diversos temas generales como la recolección de información, cómo y con quién se comparten los datos de los usuarios y la forma en que la empresa puede almacenar los datos de los usuarios —todo, pero descrito de una forma muy ambigua. FaceApp es un app desarrollada desde 2017, pero que en julio de 2019 recobró popularidad y volvió a encender focos rojos por el tema de privacidad.

La imagen puede contener: 1 persona

Bryan Oviedo jugador de Costa Rica fue de los primeros en probarla.

FaceApp dice recolectar diversos tipos de información del usuario con diferente finalidad. El app, al usarse desde un navegador, puede obtener tu historial y los complementos instalados en el navegador. Anunciantes y otros socios de FaceApp pueden tener acceso a cookies instalados (por FaceApp o terceros) en tu navegador y mostrarte anuncios de publicidad.

FaceApp también puede hacer un «registro automático» del navegador cada ocasión que se visita la página del servicio. Este registro también se realiza cuando el app es descargado en dispositivos móviles. El registro contiene la dirección IP del dispositivo, tipo de navegador, páginas URL, número de clics y cómo se interactúa con la página, entre otros.

Al usar un dispositivo móvil, FaceApp se vuelve más minuciosa. En estos dispositivos se instala uno o más «identificadores» los cuales la empresa puede acceder de forma remota, puede monitorizar o almacenar en el dispositivo de los usuarios. La política dice que tanto FaceApp como terceros pueden acceder a esta información generada por el identificador. La información es usada para publicidad. FaceApp también dice obtener metadata asociada al usuario, pero no dice qué tipo de datos técnicos recaba.

En varias partes de la política, FaceApp dice que terceros y un grupo de compañías del que FaceApp es parte, puede tener acceso y recabar información de los usuarios, pero en ningún punto menciona de qué empresas se trata. Estas entidades tienen acceso a la información descrita anteriormente como cookies, registros, identificadores, información de ubicación y de uso.

FaceApp dice que hace anónima la información de los usuarios para que no sea asociada con estos. Sin embargo, cualquier tipo de contenido subido o compartido con el app, se vuelve propiedad de FaceApp y un experto citado por un reporte del diario australiano ABC en 2017 dijo que es desconcertante lo que pasa con los datos de los usuarios luego de dejar de usar el servicio.

El app, aún más preocupante, dice que los datos de los usuarios pueden llegar a manos de otra empresa totalmente ajena en caso de que FaceApp sea comprada o entre en bancarrota. FaceApp dice que los datos de los usuarios son almacenados en servidores en Estados Unidos, pero se puede enviar a otros países en donde las leyes sobre recolección de datos o reconocimiento facial no sean tan estrictas.

«[FaceApp] pide más derechos de los que necesita para ofrecer el servicio», dijo un experto al periódico ABC. «Puede eliminar los datos de cualquier régimen de protección legal, compartirla con quien sea y mantenerlo indefinidamente. Es imposible de saber qué pasa cuando subes algo. Y ese es el problema. Ellos pueden decir que tú aceptas que ellos lo envíen a quien sea mientras que haya algo de conexión».

Sobre El Autor

Foto del avatar

Artículos Relacionados

Ver botones
Ocultar botones